Aunque los actos justos o injustos los cometen siempre personas sí que es posible hablar de instituciones sociales que fomenten situaciones injustas. Esta ponencia estudia cuatro teorías de la justicia social entre las que elegir para conseguir una sociedad más justa y las personifica.

Las tres primeras buscan crear sociedades igualitarias. Su atractivo nace de que incluyen un gran elemento de envidia – un vicio muy arraigado en la naturaleza humana. El único sistema social que transforma el plomo de la envidia en el oro de la emulación es la sociedad mercantil, el cuarto de los sistemas de esta lista. Fue David Hume el que en 1740 definió las tres reglas necesarias para que el capitalismo mercantil consiguiera crear “la paz y la seguridad de la sociedad humana”: “la estabilidad de la posesión, su transferencia por consentimiento, y el cumplimiento de las promesas”.